PERCEPCIÓN DE RIESGOS PARA LA SALUD DERIVADOS DE EXPOSICIONES AMBIENTALES. CURSO PLUS 55.

Charla de Jesús Ibarluzea.

La doble sesión del taller de hoy ha correspondido a Jesús Ibarluzea, biólogo, psicólogo, doctor en Salud Pública e investigador responsable del grupo CIBERESP del Instituto de Investigación Sanitaria Biodonostia.

Su magnífica charla ”Cómo construimos la percepción de los riesgos ambientales en Gipuzkoa”, ha tenido una muy buena asistencia: 68 personas presenciales y 17 virtuales, con un debate muy interesante, en una sala con buena ventilación mecánica (<550 ppm de CO2).

La percepción de los riesgos ambientales para la salud, atendiendo a una perspectiva psicológica, tiene carácter multidimensional, propia de los constructos psicológicos, y depende de factores o actitudes individuales como por ejemplo la voluntariedad de la exposición a dicho riesgo (fumadores), el conocimiento y la percepción de control sobre el mismo, el temor u otras formas acusadas de miedo o la familiaridad, entre otros.

El objetivo general del estudio dirigido por Jesús Ibarluzea con un equipo de 10 investigadores de 4 instituciones diferentes, es doble:

• 1) conocer y comparar la percepción del riesgo para la salud sobre diferentes riesgos de origen ambiental de la población general y de expertos/as y
• 2) analizar el efecto de variables sociodemográficas, hábitos de vida saludables, variables psicosociales relacionadas con el medio ambiente, la naturaleza, la comunidad y el conocimiento de aspectos ambientales en la percepción a los riesgos ambientales.

Se recabó información de 344 personas adultas (18 a 70 años) de poblaciones industriales de Gipuzkoa por medio de un cuestionario que incluía información sobre un listado de 17 potenciales riesgos ambientales para la salud: la exposición a la contaminación atmosférica (CA), industrias contaminantes, contaminación del agua de consumo y ruido, entre otros.

La población general mostró percepción del riesgo para la salud de moderada a elevada en el conjunto de las exposiciones ambientales sobre las que se le preguntó.

Las seis exposiciones ambientales que contaron con una percepción de riesgo mayor fueron: la CA, el residir en la proximidad de una industria peligrosa, la contaminación de los alimentos, el residir en la proximidad de una incineradora de residuos urbanos, el residir en la proximidad de un vertedero y el ruido exterior. La exposición ambiental que fue percibida con un menor riesgo para la salud fue la residencia en proximidad a granjas de animales.

En general todas las exposiciones ambientales presentaban para la población general un riesgo importante. No se observaba discriminación a la hora de evaluarlas en términos del riesgo para la salud.

Las variables que más influyen en la percepción del riesgo fueron el género (mujeres referían riesgos mayores), la edad (los adultos más jóvenes y los adultos referían una percepción de riesgo mayor que los mayores de 65 años), la relación con la naturaleza, la actitud proambiental y la preocupación ambiental.

En general, la valoración de los riesgos por los expertos en temas ambientales y de salud, mostró una percepción claramente menor de todos los riesgos ambientales.

Conclusiones.

La percepción del riesgo para la salud derivado de las exposiciones ambientales es elevada y presenta una elevada homogeneidad. La discrepancia de la percepción del riesgo con respecto a la referida por expertos/as nos muestra un potencial de trabajo que tiene diferentes líneas de actuación:

1) la necesidad de incorporar los conocimientos expertos en los debates y estrategias de participación ciudadana en relación a grandes proyectos, infraestructuras y equipamientos.

2) la necesidad de:

1. a) tener en cuenta la percepción de los riesgos ambientales de la población general en la toma de decisiones y
2. b) fomentar procesos participativos desde distintas administraciones.

3) la necesidad de poner en marcha una adecuada estrategia de difusión y comunicación de riesgos ambientales para la salud dirigida a la ciudadanía.

Una curiosa conclusión del estudio a destacar en la población guipuzcoana es que la percepción del riesgo para la salud por diferentes riesgos ambientales (contaminación del aire, proximidad industrias, contaminación alimentos, proximidad de incineradoras, proximidad de vertederos) y conductas no saludables (consumo tabaco, consumo alcohol no moderado, dieta poco saludable, sedentarismo) es similar.

¿TIENE SENTIDO?

En otras palabras, que a los guipuzcoanos en general, nos cuesta ponernos de acuerdo en casi todo.

• TEXTO: CARLOS PEREZ OLOZAGA.

Un programa municipal de Taller Plus 55 con la colaboración de los departamentos de cultura y Medio Ambiente de San Sebastián, así como de Gipuzkoa Ingurumena de Diputación.