RUTA DEL QUESO IDIAZABAL. ETAPA 6. LIZARRUSTI-ORDIZIA.

Por las tierras de los Gentiles, disfrutamos de la Sierra de Aralar.

  • Campas de Enirio en plena Sierra de Aralar.

22,9 Kms., 419 metros de desnivel acumulado. 8 horas.

Amanece en Lizarrusti. Estar en plena naturaleza es algo maravilloso. Evitaré el tópico del sonido de los pajarillos tan real como la vida misma. El albergue es centro de interpretación de Aralar e incluye parque de aventuras que encantará a los niños. En su bar podemos tomar excelentes menús para completar alguna excursión por su numerosa red de senderos.

Desayuno a cuerpo de rey junto a Joxe Ramón Agirre “Marron”, vecino de Ataun, alpinista, parapentista y fotógrafo de montaña. Ha alcanzado tres ochomiles: Everest, Cho Oyu y Gasherbrum II. Me cuenta la vida aquí y su próxima aventura de parapente en Pakistán. Agradezco a Tamara y Samuel la atención recibida en mi estancia y meto el picnic en la mochila.

Estoy en pleno Parque Natural de Aralar, joya del paisaje vasco con su icónico Txindoki o Larrunari (1346 metros). Un entorno único de bosque, prados, gastronomía, leyendas como las de los Gentiles, monumentos megalíticos, y la oportunidad de conocer la vida de los pastores.

Es además un paraíso para espeleólogos y aficionados a las cuevas. La más famosa es la de Mendukilo, junto a la de Sastarri, Putterri o Artzaintzulo. Terreno kárstico que provoca simas como Beingo o Lezegalde.

22,9 kilómetros en esta etapa, con unos 500 metros de desnivel acumulado y un largo descenso hasta Zaldibia después de pasar las famosas campas y cabañas de Enirio, Oidui y el dolmen de Jentilarri. De Zaldibia por Lazkaomendi hasta Ordizia. Punto final. Unas 8 horas, en esta ocasión acelerando un poco ante la posibilidad de tormentas a la tarde.

La mañana es magnífica y a las 09,30 horas me pongo en marcha. En la misma puerta del albergue las señales nos marcan mi destino de la Ruta del Queso Idiazabal GR283.

El primer tramo es muy bonito por el bosque, cruzando una langa, un pequeño túnel y tras un par de repechos llegamos a una zona de cuento llamada Akerreta.

Desde ahí, otro repecho más hasta llegar al embalse de Lareo. Este es un tramo muy frecuentado por familias, pues en una excursión fácil de unas dos horas y media, ida y vuelta, se puede llegar al embalse y rodearlo.

Cruzo el embalse en sentido contrario a las agujas del reloj y nada más pasar un curioso puente tipo japonés sigo las indicaciones a la derecha viendo la cumbre del Akaitz Txiki.

  • Puente en Lareo.

  • Akaitz Txiki al fondo nos indica el camino.

Enseguida entro por la izquierda en un cauce seco que hay que subir hasta una especie de depósito de aguas. Ahí las indicaciones blancas y rojas me meten en un bosque, pero no vi claro el camino que bordea el Akaitz Txiki.

  • Un vecino de Ataun me acompaña hasta el cauce.

Hay que tener en cuenta que muchas veces las lluvias o el paso de caballos borra el camino. Así que sigo al frente por las señales blancas y amarillas a cuenta de perder tiempo. A los quince minutos salgo a una pista ancha para todoterrenos de los pastores y siempre por la derecha voy subiendo por zona muy abierta y casi sin árboles hasta enlazar con la subida real.

  • Enirio.

Ya estoy en Enirio entusiasmado por el paisaje y el gran número de caballos que buscan los pastos. En Enirio, con unas cuantas chabolas muy bonitas, encuentro el cartel de Zaldibia (13,1 kilómetros), Ordizia (18,8). Todo de bajada.

Muy cerca están las cabañas de Oidui y el refugio del club de montaña de Zaldibia, Gailurreruntz, con una ikurriña pintada en su puerta.

  • Refugio del club de montaña citado.

  • Paisajes rurales.

Un poco más adelante, veo el dolmen de Jentilarri, uno de los más destacados de Euskadi, sepulcro de galería con túmulo de 15 m de diámetro y 1 m de altura. 11 fragmentos de cerámica y restos humanos de al menos 27 individuos

Se iniciaba así la leyenda de los Gentiles, pobladores gigantes de las montañas.

Continúo en agradable descenso entre más caballos y vacas hasta llegar a un altillo de impresionantes vistas. Bajo ahora por una estrecha calzada, la calzada de Enirio hasta llegar a otro espacio abierto donde aprovecho para almorzar el bocata de lomo que me preparó Tamara.

  • Vistas imponentes durante un pequeño descanso.

Un poco más adelante llego a un depósito de aguas y a una carreterita vecinal asfaltada, que poco después de pasar una granja muy bonita y con foto segura, me desvía a la izquierda por otra estrecha senda que baja definitivamente hasta Arkaka, el centro de interpretación del agua de Zaldibia. Nuevo cartel: Zaldibia (2,9 kms.), Ordizia (10,3 kms.)

  • La granja citada con grandes vistas.

  • Ya en Arkaka.

Bajo a la central y sigue la senda por un precioso recorrido a orillas de la erreka Aiestaran, terminando por un bidegorri que me lleva derecho a Zaldibia. Solo este tramo de casi 3 kilómetros de Zaldibia a Arkaka, ya merece un mañanera de domingo al ser llano y discurrir por un entorno pastoril precioso.

También el pueblo tiene su visita como podéis ver en este enlace: UNA VISITA A ZALDIBIA.

Pero la tormenta apremia, parece la diosa Mari jugona y justo en la primera casa que veré de Zaldibia entro por la izquierda para cruzar un puentecito que por carretera me lleva en dos kilómetros hasta Lazkaomendi.

  • aquí se inicia la subida a Lazkaomendi.

Pasaré por un pequeño barrio y por la curiosa ermita de San Juan ante portalatinam, contemplando la figura del Txindoki. Esta zona, tantas veces relatada en Donosti City, es para mí un Top, así que pese al cansancio de estos seis días la hago como si estuviera en el patio de mi casa.

  • ermita de San Juan ante portalatinam

No hace falta decir que al llegar a Lazkaomendi, una colina amable, y entrar por la derecha hacia el Pipas, allí tomé mi cervecita para festejar el final, aunque todavía queda llegar a Ordizia.

Desde el Pipas sigue la carretera y bajo por sendero hasta el parque de Oiangu, un lugar muy interesante con un gran merendero y la casa natal de Andrés Urdaneta, cosmógrafo y marino, alumno aventajado de Juan Sebastián Elcano.

Otro repecho descendente más desde Oiangu hasta el barrio de Altamira, entro en el casco antiguo y en la oficina de Delikatuz, centro de interpretación del Goierri, levanto los brazos terminando una Ruta antológica.

Sello el pasaporte, me entregan medio queso de Idiazabal y una botella de sidra. Truena. Cae el diluvio.

ALOJAMIENTO EN GOIERRI. HOTEL ORDIZIA.

  • Ideal para empresas y grupos de montaña y bicicleta, en pleno corazón del Goierri y en la villa medieval de Ordizia, tu punto de encuentro y descanso es el Hotel Ordizia, primer hotel de Euskadi con licencia Biosphere. Económico, rica gastronomía, con orientación sobre rutas de naturaleza y muy bien comunicado con los pueblos del Goierri y con San Sebastián.

Más detalles: HOTEL ORDIZIA.

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